dimarts, 19 d’abril del 2011

Inglés o británico



Una vez cada cientos de años se realiza en un país esa cosa llamada censo, operación bastante ridícula porque creo que hoy en día las entidades municipales tienen bastante idea de cuál es su población real. Me estaba resistiendo a rellenar el mío y al final me he rendido, cartas a doquier, una campaña publicitaria agresiva en TV y radio repitiendo hasta la saciedad que existe una multa de 1000 pounds si no cumples con tu obligación y especialmente un par de pesados de turno llamando a la puerta cada dos por tres me han terminado de convencer.


Ahora bien, este censo pregunta cosas muy impertinentes, entre ellas religión, raza, creencias, no me ha hecho nada de gracia proporcionar este tipo de datos para que luego se comercialice con ellos. Una de las preguntas más graciosas es que cuál es mi sentimiento y de que nacionalidad me considero, que si inglés o británico o soahili, o cualquier otra (español o catalán), interesante dicotomía, al final me he decantado por catalán aunque no me guste nada definirme y me considere bastante apátrida, pero bueno el kit de la cuestión es que después de llevar años viviendo aquí no acabo de aclarar el sentimiento de la población de este país, como si todo el mundo oficialmente le gustara ser inglés porque es lo que toca y cuando juega su selección todos corran a poner la banderita inglesa en su coche y renieguen de todo lo británico. Pero al mismo tiempo por lo bajini y aunque no lo quieran admitir están orgullosos de ser británicos y de su union jack. Así tímidamente, disimuladamente los supermercados han lanzado todo el merchandising de la boda real con la estampa y la bandera británica por doquier y ya he empezado a vislumbrar alguna que otra banderola en los coches.


Es gracioso, los coches que portan las banderas británicas no son la mayoría de veces los que las llevaban inglesas meses atrás, lo que me maravilla es el respeto y el pasotismo que impera en general. Es como si tuviera que decidir si quiero llevar en mi coche un toro o un burro enganchado en la parte posterior.