Vaya fin de semana más agresivo, después de haber tenido un altercado con uno de los pacientes de mi hospital, descubro que la tradición del boxeo aún está muy arraigada en Inglaterra, un deporte que no entiendo mucho pero que hizo a la gente moverse en masa ayer apoyando a uno de los contrincantes ingleses que luchaba con un ruso que le sacaba un metro y 60 kilos y la gente se volvió histérica. Alucinante. Por si fuera poco varios amigo asistieron ayer al concierto de Morrissey en el Echo Arena, el cual se canceló después de la primera canción pq no se que energúmeno le tiró un botellazo a Morrissey, no muy bonito por su parte pero tampoco no muy profesional de Morrisey que desde mi punto de vista debería haber continuado. Aún me acuerdo de un Festival Trapezi que a Sergi López le cayó un acordeón en la cabeza y continuó con el show como si no hubiera pasado nada con un reguerón de sangre cayéndole por la cabeza.
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